La correcta alimentación del cachorro es fundamental para conseguir que su desarrollo sea armonioso y llegue a ser un adulto saludable. En esta etapa hay ciertos nutrientes cuyo aporte es esencial, ya que de su disponibilidad dependen factores críticos en la conformación física y psicológica de nuestro perro. Los ácidos grasos omega3 son muy importantes en multitud de funciones orgánicas del cachorro, pero lo que mucha gente no sabe es que también influyen decisivamente en su desarrollo cerebral y, por tanto, en los avances de su función cognitiva.