Un perro que se da a la fuga de casa en cuanto tiene ocasión, pone en riesgo su propia seguridad (atropello o pérdida, entre otros) y la de todos, esta conducta escapista continuada puede convertirse en un motivo de grave preocupación para sus propietarios. Conviene analizar el motivo que la provoca para poder corregirla rápidamente, por su propio bienestar.
¿Por qué se fuga de casa tu perro?
Si en cuanto ve la puerta abierta, tu perro tiene el impulso de huir de casa, o saltar la valla del jardín, estos pueden ser los motivos:
-La `llamada de la naturaleza´: el instinto reproductor es una de las causas principales, especialmente en los machos cuando en las proximidades hay hembras en celo.
-Por alguna fobia o momento de pánico, esto es frecuente en perros que se asustan cuando se produce pirotecnia, tormentas o ruidos fuertes, en ese momento de temor disparatado pueden llegar a escaparse incluso los perros más tranquilos y equilibrados.
-Por falta de ejercicio o de entretenimiento en casa.
-Por ausencia de contacto con sus congéneres: al ver a otros perros cerca, intentan saltar la valla e ir hacia ellos.
-Por estrés, falta de cuidados, incorrecta educación o ausencia de socialización.
-Por su propio temperamento: hay perros de condición `aventurera´, muy independientes y curiosos y a los que les gusta explorar fuera.
Los perros escapistas de su jardín
También llamado `fenómeno del perro de chalet´ (o de la finca), es un comportamiento escapista que se observa a menudo en los perros que viven en casas que disponen de su propio jardín o de un espacio exterior.
Muchos propietarios, en la loable convicción de que su perro tiene un espacio suficiente donde ejercitarse y hacer sus necesidades, pueden desconocer que su perro en realidad quizá no esté recibiendo los suficientes estímulos para aprender cosas diferentes si no sale a pasear regularmente por lugares y tiene la oportunidad de conocer situaciones nuevas junto a ellos, e interactuar frecuentemente en este entorno fuera de casa.
El resultado son perros aburridos en su jardín, muy especialmente cuando son cachorros y jóvenes, así que centran su atención e interés en los estímulos exteriores para distraerse y escapar de la monotonía, y a la menor oportunidad, intentan curiosear más allá de su mundo cotidiano.
El aburrimiento propicia la conducta escapista de tu perro
En el estudio científico `Aburrimiento Bestial´ de la doctora Charlotte C. Burn y The Royal Veterinary College (publicado en 2017), se enumeran algunas de las situaciones que inducen al aburrimiento en los animales, y también en los de compañía, y se expone que hasta el cerebro de un perro aburrido puede verse afectado si carece de incentivos cognitivos frecuentes: `El aburrimiento crónico ineludible puede ser extremadamente aversivo y la falta de estimulación puede dañar la flexibilidad neuronal, cognitiva y conductual´
Asimismo, se apunta que la monotonía prolongada propicia conductas en las que el perro busca nuevas sensaciones para sentirse emocionalmente bien: `Por lo tanto, los indicadores conductuales de aburrimiento incluirán, aparentemente, signos de un aumento de la somnolencia, junto con episodios de inquietud, conducta de evitación y búsqueda de sensaciones´
Cómo solucionar el problema de tu perro escapista
-Si el perro vive en un hogar con jardín o cualquier espacio exterior propio, paséalo fuera de él con regularidad, asegúrate de que hace el suficiente ejercicio físico controlado en el paseo y conoce nuevos lugares y que se relaciona con otros perros, proponle juegos de inteligencia para evitar la frustración y el aburrimiento.
-Independientemente del tipo de hogar, el perro necesita sentirse vinculado emocionalmente a la vida familiar y para conseguirlo precisa que le dediquemos tiempo, para educarle, enseñarle cosas, jugar con él, pasearle, ponerle límites y horarios y crear una rutina que le de seguridad. Los perros que no gozan de una fuerte conexión con sus propietarios tienen más posibilidades de buscar estímulos fuera de la casa.
– Una actividad física acorde con sus necesidades es muy importante para tener un perro equilibrado, practicar deportes caninos, si la morfología y el estado fisiológico del perro lo permite, es una excelente oportunidad para fomentar una estrecha relación con nuestro perro y su socialización, además el deporte es una fuente de aprendizaje y estímulos beneficiosos para él.
Mi perro persigue bicis, motos o gente corriendo. ¿Qué hago?
-Trabajar en la educación de los perros que son muy excitables ante estímulos como coches, bicicletas o cualquier vehículo o peatón que pasa cerca de su casa y que él puede percibir.
-En los casos más recalcitrantes, es imprescindible solicitar la ayuda de un profesional, que evalúe la situación de cada caso y que nos ayude a corregir esta peligrosa conducta.
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