Las garrapatas son un grupo de artrópodos de la familia de los ácaros que actúan como ectoparásitos hematófogos (se alimentan de sangre), y por ello son vectores de transmisión de numerosas enfermedades para nuestros perros, algunas de ellas de seria gravedad.
En los paseos por el campo, en el jardín o en el parque o bien si pasan mucho tiempo al aire libre, nuestros perros están expuestos al peligro de estos parásitos, especialmente durante la primavera y el otoño, cuando el nivel de prevalencia de riesgo es mayor por la alta humedad ambiental y las temperaturas suaves. A las garrapatas no les gusta el ambiente muy seco ni las bajas temperaturas por lo que observarles y protegerles en estas estaciones es fundamental.