En muchas ocasiones, llevarle al veterinario se convierte en todo un espectáculo. Salir de casa cuando “nos lee el pensamiento”, hacer una entrada “triunfal” en la clínica, tirones de la correa, ladridos a otros perros, temblores y nervios, querer fugarse, etc. seguro que nos suena familiar. Os proponemos tres consejos para que la visita del perro al veterinario no suponga una situación estresante para él y para nosotros. ¡Se puede conseguir y es muy fácil! Leer más ...