Tan importante como elegir el pienso adecuado es proporcionarle la cantidad diaria que le corresponda ¡Ni más ni menos! Así te aseguras de que esté correctamente nutrido y sin carencias. Los perros, por naturaleza, suelen ser glotones y es necesario controlar la cantidad de alimento diario que le proporcionamos. Los fabricantes suelen recomendar en sus envases las cantidades diarias orientativas de cada producto, pero estas 3 sencillas indicaciones te pueden ayudar.
1. Su edad y su tamaño. Son factores significativos. Los cachorros, por ejemplo, deben tomar un alimento específico en esta etapa crucial de su vida, que asegure su correcto desarrollo y crecimiento. La dosis diaria recomendada debe repartirse como mínimo en unas tres tomas al día hasta los seis meses de edad, teniendo en cuenta que en estas edades la capacidad de absorción de su aparato digestivo aún es limitada y no pueden digerir un volumen de ración excesivo, que les provocaría diarreas y vómitos, entre otros trastornos. A partir de los seis meses ya podríamos reducir a dos las tomas de alimento al día. Este control del pienso es esencial en los cachorros de razas grandes (no por ser grandes tienen que comer muchísimo), ya que ingerir demasiadas calorías al día provoca un crecimiento excesivamente rápido, que acarreará con toda probabilidad, problemas osteoarticulares.
Los perros mayores pueden volverse inapetentes, de apetito más caprichoso o con dificultades para hacer bien la digestión, por eso además de ofrecerles un alimento palatable, se puede dividir la ración total diaria en varias tomas.
Cuando ya son adultos, el tamaño sí importa, ya que el metabolismo de los perros pequeños es más “rápido” que el de los grandes, y por ello necesitan una ración mucho más pequeña pero que les aporte las calorías y proteínas suficientes.
2. Su estado fisiológico. Si tu hembra está esperando cachorritos, sabrás ya que necesita un pienso especial puesto que sus necesidades energéticas aumentan durante la gestación, y seguramente hay que incrementar los cantidad de alimento que debe consumir diariamente así como la frecuencia de sus comidas. Igualmente sucederá mientras esté amamantando a sus pequeños. Consulta con tu veterinario estos aspectos.
Si le has esterilizado, el riesgo de obesidad suele aumentar y el perro tiende a pedir más alimento, ¡parece que nunca tiene suficiente!, pero se debe respetar la cantidad que le corresponde al día –no le des más aunque te mire con esa carita triste–, ya que subiría de peso rápidamente. Es muy importante utilizar un pienso bajo en calorías y con aporte de fibras, para que se quede saciado.
Si tu perro padece sobrepeso u obesidad, el control de la comida es esencial: aquí sí hay que respetar escrupulosamente gramo a gramo la cantidad diaria que haya sido prescrita para que recupere su peso ideal. Como ya te hemos contado en este Blog, el sobrepeso supone un grave problema para la salud y el bienestar de tu compañero.
3. Su nivel de actividad. Parece lógico ¿verdad? Los perros que llevan una vida sedentaria, con un nivel moderado de ejercicio (pequeños paseos, juegos suaves, etc.) no tienen las mismas necesidades que aquellos con un mayor nivel y frecuencia de actividad o los que practican habitualmente cualquier deporte canino (mushing, canicross, agility, etc.). Estos atletas necesitan, además de un pienso específico que satisfaga sus elevadas necesidades de energía, una cantidad diaria muy precisa y, generalmente, un número de tomas determinado, dependiendo de si están en plena temporada de competición o bien en “descanso”.
Cómo medir la cantidad diaria
Se puede utilizar el vaso medidor que el fabricante suele proporcionar. Si se necesita calcular los gramos exactos porque el perro tenga alguna necesidad especial como adelgazamiento, mayor o menor nivel de actividad de lo habitual o alguna patología, la báscula de la cocina nos vendrá de perlas.
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